La fase del noviazgo debería ser una etapa exploratoria, de ajuste y acople entre las parejas, para garantizar el éxito en el futuro matrimonio. Para ello, deben existir unas etapas las cuales no se debe omitir, ya que son las que permitirán que la relación de pareja se desarrolle y crezca. Recuerda que las relaciones interpersonales se configuran mediante la atracción física, el alimento emocional, el direccionamiento mental y el acompañamiento espiritual.
- Etapa: Atracción. Las relaciones interpersonales inician por los sentidos, en donde los ojos y el oído juegan un papel fundamental, sin desmeritar el rol de los demás sentidos. La Atracción puede ser física, emocional o ambas, y es el inicio de la relación, lo que hace que uno se fije en el otro y que se encante o se atraigan entre si. Lo normal es que inicien la fase de atracción como amigos.
- Etapa: Exclusividad. Una vez cursada con éxito la etapa de Atracción inicial dentro de las relaciones interpersonales, se acuerda el tener exclusividad, es decir el mutuo consentimiento de que se van a respetar y enfocar en su relación de pareja, dejando en un segundo plano las atracciones con otras personas. En esta fase del noviazgo se abandona el deseo de salir con otras personas para dar paso a una consolidación de la relación existente, es decir, dos personas que antes eran amigos, se separan del grupo y empiezan a disfrutar ellos solos juntos.
- Etapa: Intimidad o Relación especial. Es la fase en la que la pareja comparte experiencias en privado, es decir, sin la presencia de terceros. Durante la misma, los integrantes de la pareja tienen oportunidad de mostrarse como son realmente, sus defectos y virtudes. Es una etapa crítica en cualquier relación, ya que si el balance de todos los aspectos de la relación de pareja no es favorable, suele quedar inconclusa.
- Etapa: Compromiso o Relación firme. Es la fase de consolidación de los lazos amorosos, en donde la pareja decide pasar a la siguiente fase que es el matrimonio, donde unirán sus vidas en una convivencia permanente, con todas las características que ello implica.
Las relaciones interpersonales amorosas comúnmente denominadas noviazgo, inician con un etapa de atracción, la cual conlleva a la determinación libre de que desean la exclusividad, siguiendo con la intimidad y profundización de la relación de pareja en todos los campos, finalizando con el compromiso y acuerdo de que su deseo es continuar con la relación para siempre. Cuando se transita por estas cuatro fases del noviazgo, se asegura una solidez en la pareja antes de emprender el matrimonio. Una pareja ideal es aquella capaz de hacer aflorar lo mejor de uno.