No es fácil educar a nuestros hijos, sin embargo los padres hacemos todo lo posible por desempeñar este rol lo mejor posible. Deseamos ante todo, que sean felices y actúen a lo largo de su vida con honestidad, responsabilidad y justicia.
Debemos recordar en todo momento, que ejercemos una influencia determinante en ellos, dado que gran cantidad de investigaciones apuntan a afirmar que los primeros años de los niños son decisivos en su desarrollo personal y por ende inciden directamente en la toma de decisiones y respuestas a los acontecimientos que irán ocurriendo en el camino llamado vida.
Para tener en cuenta:
- Potencia sus talentos y fortalezas. Destaca lo especial que hay en ellos, apóyalos en la búsqueda de ese tesoro, sin menospreciar o tratar de eliminar otras de sus características. Ofréceles las oportunidades para que descubran lo mejor de ellos.
- Propicia el hábito de plantearse interrogantes y respeta sus respuestas y comentarios. Hazles preguntas para que ellos aprendan a sacar sus propias conclusiones: ¿Por qué crees que esto es así? ¿Crees que podríamos hacerlo de otra forma?
- Alienta a tus hijos a que sean proactivos. Anímalos a fijarse metas sencillas y apóyalos en el proceso. Soñar y establecer las acciones para materializar sus sueños, es un proceso que puedes promover desde la infancia.
- Resguarda la identidad única de tus hijos. Es el tesoro que los hace únicos. Edúcalos para que nunca olviden quiénes son y lo que desean. Deben asumir que brillan con luz propia, por tanto no pueden ser opacados por nada, ni nadie. Salvo que su propia conducta atente contra esa luz.
- Presta atención a la información a la cual tienen acceso a través de películas, juegos, televisión, internet y otros. En ocasiones no es tan inofensiva como parece y puede formar falsos criterios. Mantente comunicada con ellos y pegúntales sus opiniones y comentarios.
- Demuéstrale constantemente el amor que sientes por ellos y tu apoyo permanente. Tienen que sentirlo, por ello lo ideal es usar no sólo las palabras, sino también: las acciones conjuntamente con demostraciones de afecto como las caricias, abrazos y besos.
- Enséñale los valores primordiales. El respeto, la honestidad, la importancia de decir la verdad, entre otros. No importa cuántas veces tengas que corregir su conducta, cuando atente contra alguno de estos valores.
- Comparte el mayor tiempo posible con ellos. Tiempo de calidad, donde exista la atención adecuada. También es importante compartir actividades divertidas y de esparcimiento, ya que permite estrechar los vínculos.
- Desarrolla la autoestima de tus hijos. Estimula la confianza en sí mismos, su aceptación y valoración positiva. Así como un sano manejo de las emociones como la rabia, ira, tristeza, dolor y otras.
- Ten paciencia con los resultados. Educar es un trabajo diario, que requiere de paciencia, constancia, perseverancia y por supuesto mucho amor.
Fundadora de TuESTIMA.
Fundadora de TuESTIMA. Consultora Marketing Digital. Asesora Motivacional. Mamá Bloguera. Emprendedora. Líder Proactivo. Amante de la superación personal. Coach Autoestima Infantil.
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Fundadora de TuESTIMA.
Fundadora de TuESTIMA. Consultora Marketing Digital. Asesora Motivacional. Mamá Bloguera. Emprendedora. Líder Proactivo. Amante de la superación personal. Coach Autoestima Infantil.
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