El agua es asociada al origen de la vida. Los primeros seres vivos se generaron en el caldo cósmico de los océanos. El embrión humano se desarrolla durante nueve meses en el líquido amniótico del útero materno. Así, el agua es asociada a la “Gran Madre Nutricia” y al “Mar generador de la Vida”.
Biodanza acuática es una extensión o especialización de Biodanza cuyo objetivo es inducir estados de regresión y de vivencia oceánica en el útero materno, con la finalidad de reeditar, desde el regazo del grupo, en un ambiente de amor, reverencia y armonía, las condiciones de nuestra llegada a este mundo (reparentalización) y alcanzar estados de expansión de conciencia. Tiene un efecto profundo sobre el inconsciente vital. Es una de las extensiones más importantes de Biodanza, porque actúa directamente sobre la inteligencia de las células (inconsciente vital) produciendo renovación celular. Los movimientos dentro del agua reproducen el estado arcaico de flotar en un caldo de vida primordial. Biodanza acuática induce la suprema experiencia de fusión con la totalidad.
La Regresión es el retorno psicofisiológico a etapas perinatales, es decir, inmediatamente anteriores o posteriores al nacimiento de una persona.
Al estado de regresión se llega a través de trance, inducido en Biodanza como un mecanismo psico-fisiológico en el que la persona se abandona a ciertas condiciones externas e internas para ingresar a un estado de conciencia diferente, disminuyendo la conciencia de su propia identidad.
El estado de regresión en el que un individuo pierde los límites corporales ha sido denominado por C. G. Jung como “experiencia oceánica”.
Re-progresar es la posibilidad de retornar al origen para progresar en nuestro proceso evolutivo hacia nuevos estados de expansión de conciencia.
Los movimientos dentro del agua producen el estado maravilloso y olvidado de flotar en el líquido amniótico. Inducen la suprema experiencia de regreso al origen y posteriormente, un renacimiento. Es una experiencia de totalidad que perdura por varios días.
El agua representa el abandono, el placer, el instante vivo, la regresión, la vivencia oceánica, sensación conmovedora de perder los límites del cuerpo físico para flotar en un fluido reconfortante y tranquilizador, sin espacio y sin tiempo.
Con ejercicios de carácter lúdico, integración motora, placer cenestésico, sutileza, sensualidad, fluidez, contacto y bienvenida, el participante alcanza sentimientos de revitalización y armonía, impulsándolo a nuevas formas de acción y de relación con otros. Biodanza acuática ofrece las condiciones ideales de movimiento y de renacimiento con placer cenestésico.
La afectividad caracteriza las sesiones de Biodanza acuática. Surge una profunda conexión entre los participantes. La vivencia de formar parte de la comunidad humana supera las tendencias neuróticas de discriminación. Todos los miembros del grupo son fuente de amor, respeto y belleza.
Esta vivencia nos prepara para la experiencia suprema de amor.
Biodanza acuática es una de las más grandes propuestas de Rolando Toro para un mundo «carente de placer, afecto y enfermo de civilización.»
Es imprescindible haber practicado un tiempo Biodanza en aula antes de asistir a una sesión de Biodanza acuática.
Beneficios:
- A nivel existencial:
• Fuente de vida
• Medio de purificación
• Renacimiento con amor - A nivel orgánico:
• Integración global de todo el cuerpo
• Renovación orgánica - A nivel psicológico:
• Disolución de tensiones
• Superación de los estados de angustia
• Elevación del humor endógeno (antidepresivo)
• Sentimiento de libertad y espontaneidad
• Restauración del erotismo
• Desaceleración psicomotora, disminuyendo el nivel de vigilancia (anti-estrés)
• Aumento de la capacidad de auto-curación, conexión con el Inconsciente Vital
• Aumento de la capacidad para reencontrarse y tomar contacto consigo mismo (integración).