Sé que estás pensando que no lo es.
Sé que piensas cosas como éstas:
“-Después de tantas cosas que vivimos juntos; Todas las promesas que nos hicimos…;
-Hicimos tantos proyectos y teníamos tanto por hacer, que es difícil pensar que podamos volver a empezar.
– ¿Volver a empezar?
– ¡Pero si no puedo confiar de nuevo!”
Comprendo cómo te sientes, no puedes pensar en otra cosa que en el error…
Lo sé.
Parece una pesadilla de la que no puedes despertar, un mal sueño que quisieras evitar… pero es real. ¿Será que es demasiado para asimilar para ti?
“- ¿Perdonar?
¿Y si vuelve a pasar? -”
Por ahora no puedes pensar en otra cosa, tu corazón te nubla la razón y sólo piensas en la posibilidad de que ocurra de nuevo…
Respira…
La infidelidad en una pareja (que ha establecido compromisos mutuos al inicio de la relación) no es casualidad.
Repetiré esto último: No es casualidad.
Tampoco es “culpa” de un tercero, aunque tú quieras pensar que lo es.
Una pareja sólida, no admite espacios para nadie más.
Calma, no nos ocupemos de buscar culpables.
Tú quieres volver a confiar, ¿Cierto?
“Quemar” a alguien en la hoguera no te ayudará a recuperar tu confianza en ti, ni en tu pareja, ni en tu relación.
Centremos tu atención en entender dónde se originó el error, para NO repetirlo.
Tu relación de pareja se “fracturó” antes de la infidelidad, en algún punto de su relación; Esto generalmente ocurre cuando existen diferencias entre ambos.
¿Ya estás culpando a las diferencias verdad?
Para. Recuerda, buscamos el origen para removerlo.
Una diferencia se debe a que cada uno ha tenido una formación distinta, distintos padres y distintas experiencias. Cada uno ha aprendido a “manejar” los problemas y las soluciones de distinta forma: Ninguna mejor, sólo distinta.
Y, esperas que tu pareja piense igual que tú.
Como esto NO PASA, las diferencias se convierten en fisuras, más tarde en fracturas y si no se les detiene y se les repara, terminará por romperse como cristal en pedazos.
¿Cuáles son estos detonantes que amenazan tu relación, la amenazaron o la fracturaron?
Aquí te describo unos ejemplos:
- Desacuerdo
- Discusión
- Comunicación inadecuada entre ambos
Ahora ya sabes que alguno de estos puntos o una combinación de los tres empezó a distanciarlos silenciosamente, un paso a la vez.
Empieza por un desacuerdo, un malentendido o una suposición sobre algo que “debe” ser y no es, pero así se deja como cabo sin atar. Después otro y otro más.
Estas fisuras, son “cargas” emocionales que, con el tiempo son insostenibles por cualquiera de los dos.
Pero como es emocional, no es visible a los ojos de la inconsciencia.
A las primeras señales de cualquiera de estas tres, hay que pedir ayuda para establecer un nuevo “código” de comunicación y conducta.
Después de todo, ambos empezaron su relación estableciendo compromisos. Algo pasó en el camino que amenaza su vida de pareja, no dejes pasar más tiempo. Éste es el momento de trabajar en ello.
Bien, ahora que ya entendimos que ambos tenemos responsabilidad en los resultados, si ya estamos “rotos” o “fracturados”
… ¿Cómo volver a confiar?
Empecemos por lo básico: ninguno de los dos es mejor que el otro. No se puede cimentar en el terreno de la culpa.
Aquí te describo 5 pasos sencillos, (aunque no son fáciles de aplicar) pero puedes trabajar en ellos y tu pareja también. Es tiempo de cortar la cola del pasado y empezar desde cero. No es una “lucha” por ganar, no hay guerra que declarar.
Al principio de esta relación, ¿Le pediste un resumen a tu pareja detallado de las cosas que le podías reclamar en el futuro? Suena absurdo ¿Cierto?
Empezaste de cero y ya.
Pues así se empieza, de la misma forma.
Pon en tu mente la actitud correcta y si vale la pena rescatar lo que has construido, estos son los pasos a seguir:
1.- Aceptar. Hubo una tercera persona. Nada cambiará el que haya habido alguien más, hay que aceptarlo y dejarlo ir con una intención clara: entender que la pareja se cultiva. Reconquistar a la pareja es ocuparse de volver a generar interés en el otro. Un tercero tuvo lugar al “ofrecer” más tiempo, interés, buen humor, compañía…etc. etc.
2.-Disposición de ambos para *volver a empezar*
3.-Construir nuevos lazos de confianza, es decir: confiar.
4.-Crear nuevos compromisos mutuos
5.-No reclamar
¿Todo esto te hace “corto circuito”?
No será un proceso inmediato, ni corto. Requerirás ayuda profesional para trabajar en ello, aquí has aprendido los primeros pasos. Implementa y observa el resultado. Si el reto es demasiado grande es conveniente que solicites una cita conmigo.
¡Te aseguro que será un buen comienzo!
Shala Múgica.