¿Qué es la depresión posparto?
Se trata de una depresión que se presenta luego de dar a luz. Por lo general se inicia cerca de los tres meses posteriores al parto, pero puede darse inmediatamente o hasta un año después, y prolongarse por varios meses.
La depresión postparto afecta a un altísimo porcentaje de mujeres. Puede ser causada por factores hormonales, de pareja, sociales o psicológicos.
Después de dar a luz, vives una etapa de sentimientos extremos y nuevas inquietudes. Se le suele llamar “tristezas de la maternidad”. Este tipo de trastorno no es de gravedad, si los siguientes síntomas son leves a moderados y son superados en corto plazo.
Síntomas y signos
Los síntomas son similares a los de cualquier depresión, agravados por los cambios hormonales, cambios en tu apariencia física, cambios en tu rutina de vida, y por tu nueva responsabilidad como mama:
1.- Cambios en el apetito (exceso o falta de apetito).
2.- Deseos de aislarte o la sensación de soledad extrema.
3.- Desinterés en cuidarte a ti misma.
4.- Ansiedad.
5.- Falta de energía.
6.- Dificultad para dormir o sueño excesivo.
7.- Dificultad para concentrarte.
8.- Problemas de memoria severos.
9.- Dolores de cabeza u otras parte del cuerpo que no desaparecen.
10.- Sentimientos de culpa.
11.- Baja autoestima.
12.- No disfrutas las actividades que antes te proporcionaban placer.
13.- Falta de motivación.
14.- Te sientes abrumada. Sensación de incapacidad para incluir las tareas nuevas en tu rutina diaria.
Síntomas que se relacionan con tu actitud o tus sentimientos hacia el bebé:
- Tienes dificultad para establecer cercanía con tu bebé o te cuesta relacionarte con él.
- No quieres estar a solas con el bebé, porque no te sientes capaz de cuidarlo.
- Tienes resentimientos hacia el bebé, o lo culpas por tu situación.
- Te preocupas demasiado por el bebé, hasta el punto que su sola presencia te causa estrés.
- Te arrepientes de tu embarazo y el nacimiento del bebé.
Todos estos síntomas suenan como pensamientos muy extremos, pero son más comunes de lo que creemos, pero no pasan de ser pensamientos pasajeros, que únicamente en situaciones duraderas, requieren medidas urgentes.
Es muy importante que no dudes en buscar ayuda profesional, inmediatamente que detectes que los síntomas o signos persisten y te impiden sentirte bien y manejar tu nuevo rol de mamá de manera sana y saludable. Enciende tus alarmas y, mantente atenta a tus sentimientos y emociones.