Muchas veces, de manera ligera, la palabra depresión sale de nuestra boca. No pocas veces, seguramente, le hemos dicho a algún amigo/a que hemos visto algo decaído/a: «Deja la depre, vamos a divertirnos», Si bien la tristeza severa es el síntoma más conocido de la depresión, y se ha convertido en un estereotipo de esta condición, es bueno aprender a reconocer otros signos que pueden ayudar a evitar un futuro episodio depresivo o una recaída.
Reconociendo la depresión
Si eres una de los trescientos millones de personas en el mundo que sufren de depresión, ya sabes que no es una condición para ser tomada a la ligera. Es importante controlar los síntomas con terapia y medicación (si realmente el caso lo amerita), según lo prescrito por tu médico, tanto para sentirte mejor ahora, como para reducir el riesgo de un episodio depresivo en el futuro.
Una de las mejores formas de minimizar el daño físico y emocional de un episodio de depresión es reconocerla en una etapa temprana y tomar las medidas pertinentes, lo que puede significar continuar con el tratamiento, o hablar con tu médico acerca de si es necesario revisarlo. Pero no todos los síntomas de la depresión son fáciles de identificar, y los primeros signos pueden variar de una persona a otra.
A continuación describo diez síntomas comunes a las cuales se debe estar atento, según el portal de salud www.everydayhealth.com:
- Fatiga o falta de energía
Todos nos sentimos con menos energía de vez en cuando, por lo que la fatiga por sí sola no es necesariamente un síntoma de depresión o un signo de un episodio depresivo, dice la Dra. Gabriela Cora, MD, socia del Centro de Neurociencia de Florida y diplomada de la Junta de Psiquiatría y Neurología Americana. Sin embargo, ella agrega que si el cansancio persiste y es acompañado por un bajón de ánimo y una consecuente desmotivación o falta de interés, esta falta de energía puede estar ligada a los primeros signos de la depresión.
- Insomnio
Los patrones de sueño varían de persona a persona, por lo que la mejor manera de saber si la alteración del sueño es un síntoma de recaída es tratando de recordar cómo dormías antes de que tu depresión estuviese bien tratada. Si dormías mal en aquel momento y en comparación duermes menos ahora, entonces esto podría ser una señal de un nuevo episodio depresivo para ti. «Puede que no sea un problema si no se puede dormir bien durante un par de noches, sobre todo si estás experimentando una gran cantidad de estrés. Pero ante la ausencia de un desencadenante específico que justifique tu falta de sueño, debes permanecer alerta a cualquier cambio en tus patrones de sueño regulares «, dice la Dra. Cora.
- Dormir demasiado
Todos los excesos son dañinos, por lo tanto dormir demasiado podría también ser un síntoma de depresión. Cora dice que incluso para las personas que están en tratamiento para la depresión, el número mágico de horas de sueño no debe ser mayor de ocho. Agrega que, en general, dormir más de ocho horas cada noche puede no ser tan saludable. «Si estás experimentando mucho sueño y además cambios en tu estado de ánimo, como un poco de desánimo o tristeza, esto puede indicar depresión».
- Cambios en el apetito y en el peso
De vez en cuando no es raro que podamos experimentar episodios de corta duración, en los que comemos en exceso o sentimos pérdida de apetito. Sin embargo, si esta variación viene acompañada con otros síntomas, como sentirse deprimido o pérdida de interés y de placer en actividades habituales por un período de dos semanas o más, podría ser un signo de un episodio depresivo, según Simón Rego, PsyD, director de capacitación en Psicología del Centro Médico Montefiore en el Bronx, NY. Un aumento de al menos un cinco por ciento del peso corporal total de una persona en un período corto de tiempo (aproximadamente un mes), sin justificación aparente y que además cause un malestar significativo, puede ser considerado el inicio de un episodio depresivo, dice el Dr. Rego.
- Dolor físico
El dolor físico puede ser un síntoma repentino que en algunas personas podría estar indicando el inicio de un episodio depresivo. «En algunos casos, la gente podría visitar a su médico para tratar un dolor abdominal vago, cefaleas intratables, o dolores y molestias que no parecen desaparecer», dice Cora. También aconseja a todos los médicos y profesionales de la salud que ante estos síntomas repentinos, mantengan la posibilidad de una depresión en mente.
- La vida parece menos colorida
Otro síntoma repentino de depresión es empezar a percibir el mundo que te rodea como menos colorido y con menos vida. «Para muchas personas es común percibir un cambio para bien en la calidad de los colores o en la música después que inician el tratamiento para atender su depresión», cita la doctora. Algunos empiezan a percibir los colores con más brillo, o creen que las fotos de su oficina han sido renovadas. Otros exclaman: «¡Me encanta la música de nuevo. Puedo apreciar la belleza de ella!”. Si te sientes deprimido y te parece que la vida a tu alrededor se está apagando, habla con tu médico.
- Desgaste en el trabajo
Si te sientes desgastado en el trabajo, puede ser síntoma de estar al borde de un episodio depresivo. «Muchas personas quienes dicen sentirse estresados y “consumidos” por el trabajo, en realidad lo que se sienten es deprimidos», explica Cora. Desgaste es un término mucho más socialmente aceptable que depresión. Considera por cuánto tiempo te has estado sintiendo de esta manera y determina si esto que sientes es solo debido a una asignación desafiante o son sentimientos más persistentes y de largo plazo. Si regularmente te sientes desgastado o consumido por tu trabajo… ¡cuidado! podría ser un signo de depresión.
- Problemas con la memoria
La mayoría de la gente tiene problemas de concentración de vez en cuando. Quizás últimamente puedas estar distraído por un problema familiar o financiero que necesita ser resuelto. Sin embargo, para descartar que sea un síntoma de depresión, asegúrate de que tus problemas de concentración o de memoria no están empeorando. «A veces el deterioro cognitivo es tan pronunciado en la depresión que lo llamamos seudodemencia», comenta la Dra. Cora.
- Aislamiento social
«El aislamiento social es uno de los síntomas más importantes de la depresión», dice James Overholser, PhD, profesor de Psicología en la Universidad Case Western Reserve en Cleveland, Ohio. «Cuando las personas se sienten deprimidas, tienden a retirarse de sus actividades rutinarias y se aíslan socialmente», dice. También advierte el profesor James que si una persona tiene pensamientos suicidas y poco contacto con su entorno, hay un mayor riesgo de que esta persona no reciba ayuda a tiempo y si llegase a cometer un intento de suicidio, su acción quizás pasaría totalmente inadvertida. Es por esto que él aconseja a muchas personas a luchar con fuerza contra la tendencia de aislamiento social cuando se siente deprimido/a.
- Tristeza inexplicable
Si te sientes triste, hay tres cosas que determinan si ese sentimiento está o no vinculado a una depresión: la intensidad, la duración y la causa, o más específicamente la falta de causa. Comenta la Dra. Cora que esto último se refiere a que la tristeza asociada a la depresión puede permanecer en una persona sin necesidad de que haya un disparador en particular y agrega que aunque a veces podemos rastrear los factores de estrés específicos que desencadenan los primeros episodios de depresión, no siempre se pueden identificar los factores posteriores.
Mucho de los síntomas descritos en este reporte podemos sentirlos de vez en cuando, según sea nuestro estilo de vida, en cuyo caso no habrá porque alarmarse. Pero ten presente que si manifiestas alguna de estas señales por más tiempo de lo que se considera como normal, por favor busca inmediatamente ayuda de un profesional de la salud mental. Si bien la cifra que anunciamos al inicio de este artículo puede resultar algo intimidante, la buena noticia es que hay esperanza para estos millones de personas que viven con depresión clínica. Este trastorno del ánimo no solo puede ser tratado, sino que además se puede prevenir.
Lo otro que se debe tener presente ante un cuadro depresivo, es que no solo el tratamiento con fármacos resulta útil, también uno puede ayudarse buscando formas de aliviar el estrés mediante la práctica habitual de la meditación, el yoga, y lecturas que nutran nuestro espíritu y amplíen nuestra mente.