Cuando tu cónyuge no quiere hablar, debes definir una estrategia de comunicación que logre incentivarlo, revirtiendo sus emociones negativas en positivas, sus pensamientos negativos en positivos. Es posible y te vamos a enseñar cómo.
Define y determina claramente las razones que le llevaron a tu pareja a guardar silencio. Tal vez alguna injusticia que cometiste, un comentario inoportuno, la desilusión de no sentirse amado, o alguna pelea en la que fuiste muy agresivo y lo heriste.
Las relaciones y la técnica para comunicarnos efectivamente, es como un músculo que hay que desarrollar con el tiempo. Así que a practicar. Porque se hace camino al andar y se aprende a transmitir emociones al comunicar.
Lee acerca de las diferencias entre hombres y mujeres, especialmente en lo relativo a la comunicación. Aunque las diferencias se muestran por lo general como un misterio, se pueden aprender. Por ejemplo, que la mujer no perdonará que te olvides del aniversario o alguna fecha importante, mientras que el hombre no soportará los celos y pequeños coqueteos con sus amigos.
Aprende a no tomar las cosas demasiado personal. Si tu pareja no se encuentra dispuesta a complacer los deseos sexuales en un momento determinado, no se trata necesariamente de ti o de falta de amor, sino de simple cansancio o la presencia de preocupaciones.
No sobre-analices tu pareja. Algunas veces podrás intuir el silencio y falta de ganas de hablar de tu pareja, pero no siempre puedes leer su mente, y hay que dejar un espacio para que la pareja se serene.
Habla de tus sentimientos de una forma no acusatoria, no culpes a tu pareja. Hacer lo contrario sólo va a conducir a un alejamiento creciente y a la lejanía, sobre todo cuando se tratan temas emocionales relacionados con el matrimonio y la pareja.
Pregúntale a tu pareja cómo se siente más cómodo y menos abrumado, en lo relativo a la comunicación. ¿Ayudaría si establece un momento y oportunidad para hablar?
Aprende acerca del tipo de personalidad de tu cónyuge, y aquellos momentos y situaciones en los que es más elocuente.
Es fácil desanimarse cuando lo único que escuchas de tu pareja es el silencio. Sin embargo, es necesario que trabajes por tu matrimonio y hagas todo lo posible por restaurar esa comunicación perdida.
No existe prototipos y el comportamiento de cada persona en pareja, puede ser sustancialmente diferente, pero la clave está en escuchar y observar los mensajes no verbales presentes durante el silencio y en pleno auge de la comunicación, para aprender de ellos y replicar lo bueno.