El divorcio es un suceso sumamente estresante y complicado de sobrellevar. No se supera fácilmente y menos aun en soledad. Las reflexiones que haremos a continuación están hechas especialmente para ayudarte a superar este difícil momento y apoyarte en el proceso.
Realmente tenemos que decirte que el mejor remedio para curar las heridas del corazón es vivir el duelo. Solo él podrá hacerte abrir los ojos y llevarte a la felicidad, llenando tu vida de esperanza. Es un proceso que varía de persona a persona. Lo importante es no engancharte en el dolor.
Siempre ten en cuenta que el pasado ya paso, pero de él te llevas la enseñanza. Todo lo vivido se convierte en sabiduría para el futuro, por eso no debes lamentarte de nada, porque en la vida, todo es como debe ser.
El presente es el momento indicado para sanarte y dejar todo tu dolor atrás. Toma lo que necesitas y lo demás lo arrojas. Es hora de depurar tu corazón y darte una oportunidad.
Recuerda que hay gente a tu alrededor que te necesita y quiere verte bien. Eres una persona especial, única e irrepetible, con valores y defectos como todo ser humano, pero con un corazón fuerte capaz de sobrellevar los peores momentos y superarlos con gran facilidad. Cada vez que te despiertes, da gracias a Dios por tu vida y llena tu alma de energía para continuar.